NO ME LLEVO BIEN CON MIS PAPÁS

Hoy quiero escribirles de esos seres hermosos por los que estamos aquí…. ¡NUESTROS PAPÁS!

A lo largo de mi vida he pasado por muchas cosas con mis papás, algunas buenas y algunas otras no tanto (pero, ¿quién soy yo para juzgar, ¿no? A fin de cuentas, somos humanos).

Llevo algunos años pensando que en esta vida venimos a dar lo mejor de nosotros, y que no todo el mundo piensa de la misma manera. Por lo mismo, es NORMAL enojarnos con nuestros papás, PERO mi consejo y lo que a mí me ha funcionado es que en lugar de desesperarme o pelear, me calmo, respiro un poquito y nunca, pero NUNCA respondo de manera en que pueda arrepentirme de lo que pueda decir cuando se me pasa el enojo.

Cuando yo me pongo de enojona, lo que hago es alejarme unos 30 minutos del que me hizo enfurecer, me quedo yo y mis pensamientos y comienzo a pensar por qué me siento así, si vale la pena todo mi drama.

¡NO VAMOS A ESTAR AQUÍ PARA SIEMPRE! ¡Valora!

Siempre puedes decir lo que piensas buscando la mejor manera de hacerlo, así que no pierdas el tiempo discutiendo, llenándote de estrés y de mala vibra. 

Sientan agradecimiento con sus papás, de cualquier manera, ellos te están diciendo lo que piensan que es mejor para tu vida. Cada cabeza es un mundo, si no coincides con sus pensamientos al menos respeta eso y ten presente esto para la próxima que tengas un problema con tus papás o con cualquier persona.

Si tienes a tu papá o a tu mamá contigo, ámalos, disfrútalos y apapáchalos. Nadie elige a sus papás, pero sí podemos hacer que el tiempo en que estemos con ellos en esta vida sea tiempo de calidad lleno de amor.